En mi soledad,
una velada luz blanca avanza con calma,
como susurros penitentes
sobre espejismos en sombra,
en un reflejo difuminado y tenue,
de lo que una vez fue realidad.
En la oscuridad de mi soledad,
busco rosas rojas,
que planté para ti,
y el viento las acariciaba al azar,
pero ahora,
quizás yacen marchitas,
y no sé cuándo florecerán.
En el jardín de atrás,
el silencio,
espinas y recuerdos brotan,
y nada más.
Una ausencia aflora,
como en un desván sellado al tiempo,
implacable y voraz.
Ningún aguacero
limpiará el suelo
de mi soledad,
de nuestras historias,
mezcladas como hojas al vuelo,
que vienen y van.
Si mi alma fuera brizna de hierba,
quizás,
germinen huellas de esperanza,
quizás,
se disipe este pesar.
Si mi amor solo fuera tuyo,
y nada fuera mío,
hoy, solo quizás,
en mi eterna soledad,
no tendría nada que enterrar.
📔📘📙📓
Preciosa, podía ver la rosas, el suelo, ese, que no se limpiará, el patio de atrás, la brizna y el desván…grande Paco, eres un artista
Es muy bonito,trasmite mucho sentimiento.