Bajo el manto nocturno
lleno de anhelos y susurros
bajo el camino de sombras y suspiros,
se erigen muros de silencio y desesperación
en una melodía de ausencia.
Murmullos de olvido.
Un llanto al viento.
Una soledad que pesa,
donde el amor nunca
escucha un adiós.
Un canto,
que se eleva con voz dolorida
de palabras quebradas.
En mi voz
un legado de lamentos
en un vacío que resuenan
los ecos olvidados
de un alma enamorada
y un corazón rendido.